«¡Y yo pensaba que ya no iba tener tiempo de cumplir todos mis sueños laborales!»
– Jesús Alonso, en una oda a Salinger que pasaba por la acelerada actualidad laboral.
(visto en lo de Ana Pérez)
Hale, dos años más para alcanzar tus objetivos.
La reforma será necesaria o no, desconozco el asunto como para pronunciarme sobre la necesidad. Pero desde luego es un tema lo suficientemente serio como para que el gobierno hubiera sometido el asunto a debate público. Pero no, este gobierno sigue empeñado en hacer las reformas más importantes de cara al futuro de forma oscurantista y por la vía rápida. Les pasó con la Ley de economía sostenible y les ha vuelto a pasar con la reforma de las pensiones (por mencionar sólo los dos casos más recientes). Demasiada preocupación por la oscuridad en dos asuntos muy importantes y en una época en que a los ciudadanos se les exige cada vez más transpariencia y estar sometidos a más vigilancia y más control.
Realmente, intento escapar al lema derechoso de que se está haciendo todo con improvisación… pero es que allá donde miro sólo veo improvisación. Me debo estar perdiendo algo porque… ¿Qué sentido tiene, ahora que se anuncia más paro para 2010 (un montón de jóvenes sin tener nada que hacer), aumentar en 2 años la edad de jubilación, sin consulta de ningún tipo?
Espero que esta propuesta reciba un varapalo, pero es que lo que pueda hacer la oposición ya no quiero ni imaginarlo.
En definitiva, intento ser optimista con el proceso democrático pero a veces llego a pensar que no hay manera de creer en la política con un unilateralismo detrás de otro.
Para colmo, ahora se habla de buscar consenso en educación. Y si se logra, ¿no significará eso, a posteriori, que bloquearán cualquier cambio en la educación, cuando hoy por hoy sabemos que la educación sigue fatal?
Qué asco de política. Justo hoy me compré el libro de Lakoff sobre el manual del progresista y, evidentemente, no encontré nada interesante. Ya no sé dónde está la respuesta, si es que hay.
Ya tío, yo no sé si es improvisación. No oculto que no simpatizo demasiado con el actual gobierno (porque no los veo capacitados para modernizar las cosas que necesitan ser modernizadas, porque en temas importantes como son las garantías de derechos y libertades digitales han dado muchos pasos atrás desde 2004), pero no me gusta que en las crítica la gente piense que los únicos que critican son los PPeros. Evidentemente, el PP critica… critica todo. Pero ellos están igual de poco capacitados para modernizar algo, y en su anterior etapa dieron los mismitos pasos atrás que luego dio ZP. Ellos critican porque así les va bien en las encuestas, yo critico porque creo que otra forma de gobernar, más respetuosa, más transparente, que haga mejor uso de la red para la participación ciudadana, más clara con todos… es posible. Y que se tramiten a puerta cerrada leyes tan importantes como ésta o como la de economía sostenible (llamada, según el propio gobierno, a ser el bastión sobre el que apoyar la modernización del modelo productivo estatal) es malo por dos cosas: porque es un mal síntoma (no sé si de complejo de incapacidad, de debilidad o de simple miedo a que la sociedad opine «otra cosa») y porque al cerrar la puerta se impide que mucha gente que podría aportar cosas, crear grupos de discusión y, al final, hacer un proyecto más útil que satisfaga a más personas, participe. Todo mal, todo mal. Yo intento no meterme mucho en estas cosas (está uno ya escaldado, el post es todo lo aséptico que se puede –¡ni siquiera me mojo en decir si es buena o mala la medida!–, pero a veces es imposible no decir algo.
En cuanto a la medida de retrasar 2 años la jubilación creo que no es acertada. Así se perjudica a los trabajadores de edades avanzadas que se quedan sin trabajo y después les es muy difícil volver a encontrar trabajo. Estos trabajadores acumularán más años sin cotizar y posterirmente, menor pensión a percibir. Sería mejor dejar que el que quiera pueda seguir trabajando hasta determinada edad. Pienso que este tipo de medidas deben tomarse atendiendo a las características de cada sector y, como tu dices, estableciendo un diálogo con los ciudadanos. Saludos!
Me explico:
Desde la cúpula franquista los que idearon la transición fueron de todo menos idealistas o tontos.
Vieron claro que o empezan ellos las reformas o su final sería como el de la Bastilla :P
Pero lo hicieron de forma que se aseguraban su futuro en el «nuevo orden» y que ciertos puntos quedaban atados y bien atados (leáse el blindaje de la Constitución) cómo la creación cuasi forzosa mediante la legislación electoral de un bipartidismo (para mi casi como el sistema canovista) brutal con listas cerradas y bloqueadas con una endogamia brutal que ha generado una partitocracia bestial que se configura al margen de todo principio democrático (cómo oí hace poco en una tertulia los politicos cada vez son más tontos y yo añado más sinvergüenzas).
Resumiendo tenemos unos partidos que delante de las cámaras se dicen de todo pero por detrás piensan casi igual y son todos unos «amiguetes» y se ríen de nosotros y a mandibula batiente.
Es triste decirlo pero quizás hubiese sido mejor una toma de la bastilla que esta «transimierda» (cómo dices tú de aquellos polvos estos lodos).