Jesús Pérez comenta acerca del curioso asunto del vídeo de Alexandra Ocasio-Cortez bailando y todo el ruido que surgió a su alrededor:
¿Fue filtrado el vídeo desde el equipo de Ocasio-Cortez ? Quién sabe. A lo mejor fue efectivamente un tuitero anónimo quien puso el vídeo en circulación, pero fue el equipo de la congresista quien magnificó el asunto para construir la narrativa de “fracasa la campaña conservadora de desprestigio”.
Me ha recordado a una (ya) vieja coplilla de Tool (Hooker with a Penis) que decía lo siguiente:
All you know about me is what I’ve sold you
…
All you read and wear or see and hear on TV
is a product begging for your fatass dirty dollar
so shut up and buy, buy, buy my new record
Buy, buy, buy! Send more money!
No deberían sorprendernos este tipo de movimientos de subterfugio y propaganda digital enmascarada como difusión espontánea y comunicación entre pares. Ya en 2006 Douglas Coupland hacía bromas sobre ello en jPod.
Sin ir muy lejos, en España ya hemos visto cómo dos de los nuevos partidos que con más velocidad han ganado tracción (Podemos, Vox) lo han hecho con una gestión excelente de su comunicación, especialmente en esa modalidad (la llamada social) que consiste en hacer Inception al votante para que comparta memes creyendo no tan solo que son espontáneos sino que se los apropie, los sienta como propios y, por supuesto, los recircule a todos sus contactos.