Me llegó ayer por correo un enlace a France2 (fr) en el que se habla de Spock, un buscador específico que pretende con sus arañas indexar la web en busca de datos personales y trazar con ellos perfiles personales que agrupen datos personales de personas. Esto conlleva que la frontera entre vida personal y vida profesional se estrecha al facilitarse la reunión de estos datos. Esto, además de hacer más fácil la vida a los curiosos puede darte alguna que otra sorpresa en situaciones muy reales como una posible entrevista de trabajo en la cual tu entrevistador conoce tu intimidad (no parece una situación agradable).
Spock.com pretende rastrear la web para acumular información personal de todas las personas que están en internet, con el añadido de que no sólo planean utilizar arañas para indizar la web sino que prevén utilizar a personas para corregir datos o ampliar perfiles que el sistema automático no permite procesar adecuadamente. Para conseguir eso necesitan que cualquiera pueda participar, claro. ¿Cuál es la promesa de Spock? «si quieres poder confiar en los perfiles desconocidos que encuentres, colabora para que los perfiles de aquellos que conoces sean fiables». De esta forma la vigilancia se vuelve distribuida y nadie está a salvo de mantener su vida privada como tal de nada por muy bien que cuides tu intimidad.
Eso sí, con las pruebas que he hecho los resultados dejan mucho que desear. Buscando por nombres he tenido que subir hasta Beckham para obtener un resultado relevante (pero es que «Beckham» ya es preguntar fácil), buscando por profesión si pruebo «físicos» resulta que los perfiles que aparecen son todos de físicos fallecidos (Einstein, Newton, Feynman, Bohr, Planck), excepto Stephen Hawking y algún otro. De modo que la utilidad para buscar perfiles profesionales tampoco parece muy depurada. En cualquier buscador genérico (al menos en los conocidos) es más rápido encontrar información sobre cualquier persona.
Seguro que ésto no es para ellos un problema (al menos por ahora) ya que al fin y al cabo el meollo del asunto es construir una enorme base de datos, seguro que todavía no saben ni cómo la van a explotar, pero eso ya lo pensarán más adelante. De momento a montar la base de datos, bien gorda, bien completa. Ya verán cómo amortizarla.
*** Relacionado:
Para no ponérselo más fácil a las redes de agregación de datos: Twitter y la tentación de hablar demasiado.
Cuánto tiempo van a tardar los gobiernos en interesarse por el proyecto? O quizás ya están detrás de él?