¿Se puede violar la licencia GPL con impunidad? Si atendemos a la proliferación de complementos para diversos CMS (sobre todo para WordPress) que imponen condiciones de uso contrarias a la GPL, podríamos pensar que sí. Y esto es un problema para todos a corto, medio, y largo plazo.
¿Es posible desarrollar módulos o plugins que se integran en un sistema GPL y que estos módulos estén licenciados en términos opuestos e incompatibles con la GPL? La respuesta es que no, y sin embargo, la diligencia con que este tema es tratado en las diversas comunidades de software libre es tan diferente como la noche y el día. En unas se explicita y se defiende activamente, y en otras se hace la vista gorda. Sin embargo, por las mismas cláusulas de la GPL, los complementos para software así licenciado deben ser liberados con la misma licencia libre, y robusta.
En el centro de todo, el free rider
El anuncio del cierre de la WordPress App Store, que en su día fue muy comentada a bombo y platillo y a la que (acertadamente) sólo dedicamos una línea tangencial mientras hablábamos del proceso de integración digital vertical de Facebook, me deja un sabor agridulce.
Por una parte, no me alegra que ese proyecto en el que no estoy implicado saliera mal, y nadie debería (bueno, a menos que sean tontos, o malvados [pdf]).
Por la otra, siempre percibo un tinte de free rider a quienes beligeran para defender la existencia de módulos (o plugins, o extensiones, como quieran llamarlo en cada comunidad) y temas de pago no libres para complementar un gestor libre GPL, como puede ser Drupal, o en este caso concreto que nos ocupa, WordPress.
Por decirlo en breve: querer licenciar temas y plugins sin respetarla licencia GPL del software en el que te integras es la actitud del free rider, y es precisamente el principal problema de las licencias permisivas/blandas: son funcionales desde el punto de vista del modelo de negocio puntual (puntual en el tiempo, y también en los beneficiarios), pero tan sólo porque confieren el poder al intermediario que puede hacer derivados privativos, y por eso no sirven para defender a largo plazo los intereses de la comunidad.
¿Se puede violar la GPL con impunidad?
No entro en la libertad de cada cual de intentar cobrar por el acceso a ese código, pero no me parece aceptable que complementos que se integran en software GPL y que ni funcionan autónomamente ni tienen razón de ser en ausencia de éste, puedan ser liberados bajo licencias no libres.
Y una gran mayoría de estos temas de pago tienen cláusulas de uso per site, en función de la cual el precio se va incrementando si queremos usar el código en más webs. Es un modelo que no encaja con la libertad de distribuir libremente el código, que hay que respetar en tanto el módulo, o plugin, o extensión, no es capaz de funcionar autónomamente sin estar integrado en el gestor para el que se desarrolla. Es algo que en Drupal está aclarado explícitamente, pero la comunidad alrededor de WordPress es infinitamente menos diligente que la Drupal en este aspecto (han tratado el tema, pero intuyo que Automattic no se preocupa demasiado por este asunto). Por supuesto, es posible encontrar complementos para Drupal en esas condiciones, pero son muy pocos porque la comunidad los desincentiva. En WordPress, sin embargo, abundan.
Esta actitud es tan reprobable que las justificaciones a este modelo se apoyan floja y convenientemente en datos falsos y tergiversados (¡gasolina!, pensaron quienes en el fondo intentan hacer exactamente lo mismo que ellos).
En la sección de preguntas frecuentes de GNU leemos:
“If modules are designed to run linked together in a shared address space, that almost surely means combining them into one program.”
En un comentario en Derrotero, que hace tiempo trató este tema, añadí que:
Un tema no corre de forma independiente, para que sirva has de meterlo en una subcarpeta de wordpress y son los PHP de WordPress (gpl todos ellos) los que llaman e interpretan el contenido de los archivos del tema. Eso significa casi con toda seguridad que los estamos combinando en el mismo programa.
No es asunto nuevo, por tanto. Pero en los posts que leí cuando desde Woo subieron sus precios hace unas semanas, y en los que he podido ver acerca del cierre de esta WordPress App Store no he visto a nadie señalar la clave del debate: cuando estos complementos de pago restringen lo que el usuario puede hacer con el código, están incumpliendo la licencia.
No es un debate sobre cobrar o no cobrar, esto es diferente
No entro al debate de cobrar por el acceso al código o de cobrar por servicios prestados (como siempre se ha hecho en software libre). Ése es un debate diferente y, como decía arriba, tema para otro post.
Aunque sin duda el fiasco de esta WordPress App Store debería servir como aviso a navegantes: con un descenso tan impresionante del coste del marginal (entiéndase, el plugin más barato posible, aunque no se ajuste del todo a lo que buscamos), cobrar por software libre es casi una utopía.
Y si no liberas tus plugins o módulos de forma compatible con la licencia GPL del CMS con el que trabajas estás incumpliendo tanto la voluntad de los desarrolladores del CMS original como los términos de uso y la licencia que regula las condiciones que aceptas al trabajar con el mismo, que incluye permitir la modificación y redistribución de cualquier código derivado del mismo, si éste es puesto a disposición pública (y si intentas venderlo, eso es exactamente lo que estás haciendo).
Conclusiones
Podemos debatir mucho más sobre tiendas de aplicaciones, marketplaces más o menos controlados o supervisados y el valor que aportan. Ése es un tema para otro post.
Hoy quería hablar sobre lo mucho que pienso acerca de esa tendencia que veo en muchísimos desarrolladores a violar los términos de la GPL desarrollando complementos para CMS liberados con esta licencia libre que luego comercializan en términos incompatibles con esta licencia.
Defender el respeto a la GPL y sus cláusulas y a cómo afectan (o deberían afectar) a los complementos hechos para funcionar con un determinado software libre es clave para defender el interés de todos, y para respetar la legalidad, por descontado.
Algunas lecturas recomendadas: