A estas alturas ya no es novedad hablar de las campañas del ministerio de cultura para inocularnos una visión reduccionista, corta y escasa por diseño, sobre la propiedad intelectual. Eso, y no otra cosa, es lo que pretende el Ministerio de Cultura con «Cultura en positivo», el nuevo dispendio de dinero público del que me entero directamente en mi buzón (¡gracias, S!). Lean, lean (lleva nofollow, obv); derrochando y malgastando hasta el último día, que no se diga.
[Nueva campaña de sensibilización, dicen. Hay que tener morro.]
Pero aquí estamos, porque me sigue pareciendo increíble la cantidad de recursos públicos (estos sí, inevitablemente escasos) que se destinan no digo ya a generar servicios (en tiempos como éstos, creo que pocas cosas sirven más a muchas personas como tener en el bolsillo esos cincuenta euros que no les cobraron en impuestos), sino (y puestos a invertir en propiedad intelectual) a rediseñar un sistema completamente vacío y terriblemente defectuoso, para que vuelva a ser útil. Para que haya más remix y menos hipocresía. No, todo el dinero se va en manipulación y propaganda; y chanchulleo.
¿Qué fue de las propuestas para salir de la crisis? Reducción de periodos de explotación exclusiva, más dominio público de todo lo que se financie con dinero público. Y, repito, menor vida a los monopolios concedidos por el Estado. Pero, ¿qué podemos esperar? De la tecnofobia a la soberbia, hace mucho que mezclan robo con piratería, lo siguiente será quitar lo segundo para dejar únicamente el robo.
Yo siempre que veo que me dicen que hay que «concienciar» o hay que «sensibilizar» lo que entiendo es que no se tienen argumentos.
Sí, tiene un punto de Gestapo: si me dices que el mundo digital es así, te vuelvo a decir que eso que tú dices está mal, y lo pienso hacer hasta que te sensibilices.
Mira, esta es de hoy:
«Creative America, a grassroots coalition formed by labour unions, guilds, studios and networks, has unveiled a nationwide campaign to unite the more than two million Americans in all 50 states whose livelihoods are supported by the film and television industry»
La coalición de damnificados, diversos de ellos con tintes de mafia, poniéndose un nombre bonito: «creative». Al final, por la boca muere el pez y el posicionamiento es «robo», «perdida de empleo». Un ejercicio de framing de libro. Todo dirigido a que el senado americano apruebe PROTECT IP. No aparece ningún lado pero… ¿A que es la MPAA?
Extraído de la FAQ en la web de la MPAA:
Exacto, more than two million Americans. ¿Claro? Cristalino :D
soy un absoluto fan del libro electrónico, me encantaría poder encontrar libros interesantes que comprar…pero como en castellano no hay pues prefiero hacer una donación al Proyecto Guttemberg que tienen una noción de lo público, esta vez sí, positiva. Tienes toda la razón, no sólo son soberbios sino que además viven en un mundo que mí y a millones de navegantes nos resulta desconocido.
Me ext
Me extraña tanto que el dinero público se invierta en defender las propiedades privadas en vez de, por ejemplo, tratar de poner en el dominio público la literatura española (en castellano, catalán, euskera, gallego) que ya no tiene derechos de autor.
Pero si no tiene derechos de autor… es porque ya está en dominio público. La cuestión es la contraria: impedir que lo que está en dominio público regresa a terrenos vallados (por ejemplo, tu metes una introducción con un análisis crítico a El Lazarrillo de Tormes – no solo en DP, sino hasta hace poco de autor desconocido – y la edición ya tiene copyright), o reducir los extenuantes plazos de vida de unos derechos exclusivos para algo cuya vida económica realista no pasa en algunos casos de unos pocos meses… (y eso si se puede demostrar que estimula la creación, que vamos a dejar por el momento en que sí, por no provocar a los malos de verdad más de lo debido). Y así.