Este año, la feria del libro de Madrid sí admite libro electrónico. Es la primera vez: el año pasado no admitían (tampoco libro autoeditado). Los editores franceses, por su parte, descubren que los modelos que necesitan pasan por las suscripciones a precio reducido y acceos total, algo que decíamos hace ya dos años. Parece que ser parte del mundo editorial consiste en llegar años tarde a las conclusiones que llegan los demás. No he conocido ningún caso que mostrando tal inadaptación consiga sobrevivir demasiado tiempo.