Avisábamos hace muchos días que la UE estaba a punto de decantarse por más descomposición y menos globalización. Ayer se confirmó este movimiento con la adopción de la propuesta británica en plena crisis identitaria europea.
Avisábamos hace muchos días que la UE estaba a punto de decantarse por más descomposición y menos globalización. Ayer se confirmó este movimiento con la adopción de la propuesta británica en plena crisis identitaria europea.