«No podemos cambiar el país, cambiemos de tema.»
– James Joyce, Ulises, vía.
Es frecuente en estos tiempos que en cualquier conversación aparezcan una y otra vez los mismos temas: el no gobierno, las no elecciones, las sí elecciones, que si tal partido es la solución, que si estás confundiendo un unicornio con un partido, …
Cuando ves que tu interlocutor no está dispuesto a alcanzar acuerdos siquiera de mínimos, al menos podrás cambiar de tema antes de que la situación sea insostenible (o precisamente porque la situación sea ya insostenible sin ese cambio).
Al fin y al cabo, y al menos en esta ocasión, no creo que Joyce tuviera razón: siempre se puede cambiar de país y de vecinos y de conversaciones.
Actualización 2016-04-06: Gracias al comentario de Dani hemos corregido la cita, que en el sitio donde la comentaban estaba mal traducida y la original cambia el sentido y deja un poco sin sentido el último párrafo del post.
Creo que el original es «We can’t change the country (…)». Por lo que a lo mejor hay un error en la traducción de la cita de Joyce y no hablaba de «cambiar de país», sino «cambiar el país». En ese caso, supongo que Joyce seguiría teniendo razón.
Pero suscribo tu sugerencia de cambiar de tema.
Una búsqueda rápida parece confirmar tu apunte, así que parece que sí, que la han liado en la traducción que yo vi. Eso sí, me da un poco de vergüenza eso de «tu sugerencia», pues aunque la comparta y la recomiende creo que es original del bueno de James que mía ;D