Cuando desde el poder (sea cual sea la institución) le justifiquen alguna medida (sea cual sea la medida y las voces que la apoyen) diciendo que la toman por su seguridad, sea escéptico.
Escéptico es lo que hay que ser cuando se clausuran los servidores TOR -que aparece a menudo por este blog pero a quien nunca tuve la decencia de dedicar un artículo- en Alemania y la versión oficial dice que TOR facilita el intercambio de pornografía infantil. Hay que ser escépticos y no creerse nada. TOR no es pornografía, y cómo límite en mi postura puedo aceptar decir que no es sólo eso, TOR es privacidad. TOR es libertad para decir lo que uno piensa, algo que no está permitido en numerosas partes del mundo y que se pretende controlar en tierras lejanas y no tan lejanas, desgraciadamente. No se crean la verdad oficial, no van a por la pornografía.
Como la noticia tiene varios días y está excelentemente comentada en varios sitios, he aquí algunos enlaces:
- ¿Quién vigila al vigilante? (Español)
- Error 500 (Español)
- itNomad (Fuente, inglés)