Espejismos presentes:
si en un momento loco
nos ven volando lejos,
muy lejos, sin pensarlo,
no digan que torcimos,
así, de a poco, el gesto,
no crean que perdimos,
así, de a poco, el paso.
Por no olvidar no olviden
que, como en las leyendas,
no importa tanto el dónde
como seguir danzando.
Y claro, para seguir danzando, mucho mejor que no pare la música.
Un yámbico moderno en realidad! Una kavafiana!! Bravo!!
¡Gracias miles! Ya habría querido Kavafis que su viaje de Alejandría a Ítaca fuera un ballet sobre el mapa del mundo… ;)