The Anxious Generation es el libro más reciente de Jonathan Haidt, de quien hemos hablado por aquí en el pasado, he leído y recomendado en este blog varios de sus libros anteriores. (En Amazon lo tienen en inglés y en español.)
Haidt continúa su camino de aprendizaje desde su anterior libro (The Coddling of the American Mind) y llega a contextos que en este blog hemos discutido: diseño de servicios de internet con lógica centralizadora, modelos de negocio basados en publicidad y lucha despiadada por la atención de las personas que los usan, que se enfrentan a los trucos preparados por equipos de profesionales con el único interés de atraparlos en su aplicación durante horas y horas.
Pero el tema central es otro: la salud mental de los jóvenes que están creciendo en la sociedad constantemente conectada. Él solo se apoya en todo este contexto tecnológico porque este es el mundo en que vivimos, en el que viven los jóvenes a cuya salud mental dedica esta monografía.
Haidt analiza el bienestar mental (más bien el malestar, vistos los datos) de los jóvenes que han pasado de crecer jugando con otras personas a crecer interactuando con ellos mediante pantallas de móvil y muestra que aquellos jóvenes que usan más el móvil tienen peor salud mental, y que este efecto es peor cuanto más pequeños son los niños al comenzar a usarlo. Es también bastante peor el impacto en niñas que en niños, aunque es realmente muy negativo en ambos casos.
Los humanos requerimos de contacto con otras personas para madurar, para aprender a relacionarnos con los demás o a resolver conflictos. Tradicionalmente, los humanos hemos resuelto esto jugando con otros niños y adolescentes de edad parecida. Con la aparición de los móviles con internet y aplicaciones esta dinámica se transforma produndamente: pasamos a tener una relación fuertemente mediada por la tecnología, donde la comunicación es en los comentarios a posteos en estos servicios, y donde los comentarios de los demás pasan a ser mucho más visibles y a recibir una cantidad de atención, quizá, mucho mayor.
Esta es una idea que el propio Haidt ya adelantó en su The Coddling of the American Mind, cuando discutía el impacto de esta primera generación que pasó la adolescencia usando intensivamente internet móvil y su llegada a la universidad. Ahí también introdujo su concepto de Safetyism, algo así como seguridadismo. Que sería una aproximación vital centrada en evitar a todo coste los riesgos, que en el caso de menores implica que desde la década de 1980 se ha venido reduciendo la cantidad de tiempo jugando al aire libre que pasan los niños.
Así, llegamos a una generación que está hipersegura en el mundo físico, pues apenas salen de casa sin acompañar, pero a quienes es deja desprotegida frente a estos servicios de internet diseñados para engancharlos usando todos los trucos que la psicología conoce. Por no saber cuál sería el impacto se tomaron decisiones que ahora mismo parecen haber resultado muy nocivas. Así visto, vale la pena repensar cómo actuar de cara a los niños y jóvenes que aún están a tiempo de pasar una edad crítica con mejor balance que todas las generaciones que han pasado por su adolescencia desde hace una década y pico.
En general, un libro muy interesante, posiblemente más interesante para quienes estén de lleno en la educación de sus hijos, pero ciertamente muy interesante en todo caso, como los anteriores libros de este señor. En Amazon lo tienen en inglés y en español.
[Addenda, sobre la traducción del título al español. No soy traductor de inglés, pero no entiendo por qué en la edición española de The Anxious Generation traducen el título como La generación ansiosa. Mientras en inglés anxious expresa un sentimiento inequívocamente negativo, ansioso en español puede expresar tantos sentimientos negativos como positivos (¡Estoy ansioso por verte!). Quizá haberlo titulado La generación angustiada tiene sus propios problemas, pero el título español elegido no me transmite la misma energía que el título original propuesto por Haidt.]