A menudo, cuando se habla de privacidad con varias personas, tiene uno la sensación de andar predicando en el desierto. Bueno, entiendo que hay gente a la que no le importa, no son esos los que me «preocupan». La reacción que más perplejidad causa suele ser la de aquellas personas que reconocen que la privacidad es algo importante pero no creen que la misma esté en riesgo.
¿A qué se debe que la invasión de nuestra privacidad reciba tan escasa atención, tan poca reacción? Sin duda alguna se debe a que la invasión de la privacidad no se juzga como tal, sino que se juzga esta invasión atendiendo a las ventajas que conllevan los procesos que la vulneran. No se entra a juzgar la parte negativa del asunto, sino que nos quedamos con el envoltorio de ventajas que nos dan a cambio. El problema es que este tipo de presentación de las medidas de control dividen la respuesta, impidiendo una negativa contundente. Te ofrecen una contrapartida que a algunos parecerá bien y a otros no. Los primeros aceptarán la propuesta y los segundos tendrán, como paso previo a la formación de una oposición firme, oponerse primeramente a aquellos que están dispuesto a ceder sus libertades y aceptar las medidas de control. Divide y vencerás.
El ejemplo clásico es GMail. Un servicio de webmail impecable, fácil de usar, bonito, ligero, con espacio para guardar todos los correos que puedas recibir (aunque la mitad sólo los hayas soñado). Pero Google lee el correo, para conocerte mejor y pasarte anuncios contextuales. Más aún, puedes cifrar el correo y aún Google podrá trazar tu comunicación: quién envía (vamos, tú), a quién le envías, el asunto del mensaje, la frecuencia con la que escribes, la IP que envía el mensaje y su ubicación. Así con todos tus mensajes y contactos. La verdad es que Google no necesita abrir el correo (ojo, esta referencia es anterior a la salida de GMail), aunque desde luego si se lo dejas abrir aún sabrá más sobre tí.
GMail es un ejemplo de manual de servicio que recopila ingentes cantidades de información personal y que es juzgado no en función de sus verdaderas y profundas implicaciones, sino en base a los beneficios que ofrece (interfaz clara, ligera para los móviles, ubicuidad).
Como con GMail, la mayoría de herramientas de vigilancia reciben un trato alarmantemente benévolo. Desde las cámaras de vigilancia masiva (que «sirven» -y esto es un decir, como ya sabrán los lectores habituales– para detener agresiones -y eso es otro decir), a la retención de datos (que sirve para «desactivar células terroristas»), pasando por los controles aeroportuarios (aunque con estos controles realmente no consigan engañar a nadie). Y luego se espía a familias usando desproporcionadas leyes antiterroristas.
El sistema nos vende las ventajas envuelta en celofán y nos cuela el resto del paquete en la letra pequeña. Por eso la reacción ante las medidas que violan la privacidad son tan pequeñas, porque en la mayoría de los casos ni siquiera somos conscientes de lo que sucede (y esto es un problema importante del que muchos aún no se han percatado). Cada vez está más claro que los placeres de la pobreza han vencido nuestra burlada revolución. Y nos van a dar muchos más palos.
*** Relacionada:
Confiamos en la simplicidad
Tienes más razón que un santo-científico. No lo hubiera dicho con mejores palabras. Ten por seguro que este tema traerá cola y quebraderos de cabeza… pero qué te voy a contar a ti. .-D
Ánimo y a seguir predicando, aunque sea en el desierto.
Como bien dices. a nadie le importa asi como a nadie le importa el ecoambiente, la naturaleza, el tema del etanol, los bancos de mierda, la carestia de la comida, etc. etc. etc.
La privacidad menos le importara si se estan metiendo en cuanta red social encuentran y sale al aire. Esto es imparable y posiblemente muchos se estrellen y tampoco les importara.
Es gracioso. Tienes adsense!!! es algo asi como hablar que me espian pero confio en que google me mande dinerillo. no te preocupes… yo tambien lo tengo en otro blog que abandone y todavia sigue sumando clicks
un abrazo.
Oswaldo
http://proyectofuturo.wordpress.com
Twitter: http://twitter.com/proyectofuturo
Cali – Colombia
Mmm
No estoy completamente de acuerdo. no les estoy entregando todos mis correos, mi agenda, mis documentos de ofimática. Pillo la idea que quieres comentar, pero no es exactamente lo mismo. Me gustaría tener otra forma de mantener este blog y todo lo que le rodea sin que me cueste dinero de mi bolsillo, de momento esta es la mejor opción porque no tengo que gastar tiempo buscando anunciantes ni nada.
Lo de los aeropuertos me tocó vivirlo hace poco y es indignante…
Me demostraron que sus medidas de seguridad no servían para nada, os cuento mi experiencia en barajas.
Después de bebernos deprisa y corriendo todos los zumos y toda el agua que llevabamos por que nos sabía mal tirarla (llevabamos zumos y agua porque veníamos en bus desde Valencia) llegó el momento de cruzar por el detector de metales.
Pasé por el detector de metales y la máquina pitó como al 80% de la gente que pasa, de los cuales la mayoría les dejan pasar sin mayor preocupación, por lo que ya me contarán para qué entonces la tontería.
Yo no tuve esa suerte y me pidieron que volviera a pasar, después que me quitara la chaqueta y finalmente me pidieron que me quitara las zapatillas. ¿Pero qué se pensaban que llevaba un arma escondida en los pies?
Bueno me hicieron finalmente cruzar por el detector descalzo y enseñarles las suelas de mis pies y como no vieron nada pues me dejaron pasar.
Intuyo que pitó por la cremallera del pantalón pero claro no se les ocurrió pedirme que me quitara los pantalones, el caso es que tanto mareo y lo único que consiguieron fue molestar, porque si hubiera tenido una pistola metida en los calzones habría pasado de igual modo que la mayoría de la gente que da positivo en el detector y los dejan pasar.
Otra cosa que me molestó bastante fue el nuevo servicio que ofrecen en el aeropuerto antes de embarcar.
No se si recordareis hace no mucho un caso de una pareja que se fue de luna de miel y volvieron con una maleta repleta de drogas, la mujer fue a la carcel pero tras ponerse en marcha la maquinaria legal española finalmente se llego a la conclusión de que la maleta había sido manipulada en el aeropuerto. Pues bien, la noticia dio la vuelta el mundo y gracias al pánico que generó los aeropuertos ahora se forran mediante un servicio de precintar las maletas con un film de plástico a nada menos que 5 por maleta(en barajas, en Cancún fueron 10$). La gente hacía largas colas para precintar sus maletas, pero ¿tenían alguna garantía de que su maleta estaba a salvo? Pues no, ninguna, si vas a recoger tu maleta y la encuentras desprecintada pues sabes que posiblemente t la hayan abierto pero careces de ningún resguardo que así lo demuestre por tanto lo único que podrás hacer es avisar a las autoridades antes de recoger la maleta y si encuentran ésta llena de droga tratar de convencerles de que tu la habías precintado.
En fin no se cuantos casos habrá de que una maleta haya sido manipulada para transportar drogas pero lo que sí se, es que los aeropuertos sacan un importante beneficio con el pánico infundado entorno a este asunto.
Lo siento si me he desviado un poco del tema del post pero es que necesitaba quitarme esta indignación de encima y transmitírsela a alguien.
Nada, aquí del tema de los aeropuertos hemos hablado bastante, y con mucha indignación. No te sientas solo, jeje.